Autoridades sanitarias informaron que se detectó un caso de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB), conocida como la enfermedad de las “vacas locas”, en una granja en el suroeste de Inglaterra.
La Agencia Británica de Salud Animal y Vegetal (APHA, sus siglas en inglés) destacó que “no hay riesgo para la salud alimentaria” y que el animal murió y fue sacado de la granja, ubicada en Somerset.
"Se han implementado restricciones de circulación para detener el movimiento de ganado en el área mientras continúan las investigaciones para identificar el origen de la enfermedad”, señaló la agencia en un comunicado.
Para la veterinaria jefe de APHA, Christine Middlemiss, se trata de un “procedimiento estándar”, lo que demuestra que “el sistema de vigilancia para detectar y contener la enfermedad está funcionando”.
Este tipo de casos ha aparecido esporádicamente en las islas británicas desde la crisis de finales de la década de 1990, que provocó la muerte de millones de animales.
Kommentare